¡Más de 25 rutas disponibles a lo largo del año!

 

Recorremos en bicicleta senderos, vías pecuarias, viejas calzadas, caminos naturales, vías verdes, caminos agrícolas y forestales, que nos permiten realizar un agradable viaje.

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Las rutas discurren en parajes rurales de la geografía de la península, que mantienen destacados valores ambientales y culturales, que conservan actividad tradicional. También para observar las huellas de la actividad humana que ha alterado el medio ambiente, y que nos genera una inquietud, por nuestra contribución indirecta al deterioro y degradación ambiental del espacio.

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Están diseñadas las rutas para adentrarnos en diversidad de territorios: zonas naturales más salvajes y entornos rurales, más cotidianos y humanizados. Exploramos en el viaje el mundo natural de los espacios libres y también nos detenemos a observar las huellas de la actividad humana que ha alterado el medio ambiente, y que nos genera inquietud, por nuestra contribución indirecta al deterioro y degradación ambiental del espacio.

 

Llegando a los pueblos, visitamos el patrimonio cultural histórico-artístico, conocemos los rasgos del patrimonio inmaterial y podremos detenernos en un acogedor hospedaje, donde disfrutar tras la jornada, de un merecido descanso.

 

El ritmo de viaje es tranquilo, variando el nivel de dificultad, desde recorridos suaves y cortos, hasta otros más exigentes, dirigidas a asiduos de la bicicleta. Las características de cada ruta se especifican  en cada ruta, para que el viajero pueda elegir la más apropiada a su condición física y conozca los temas destacados que contiene.